Patatas con Salsa Brava y Tomillo







Whole Kitchen en su Propuesta Salada para el mes de julio nos invita a preparar un clásico de la cocina española: PATATAS A LA BRAVA.


Quien haya pedido alguna vez una tapa o ración de bravas, chateando o de cañeo por cualquier rincón de nuestra tierra, que levante la mano.

Yooooooooooo.

De este plato tan nuestro, tan español hay mil y una versiones. Papas fritas, cocidas, picantes, menos picantes, con mayonesa, con alioli... pero están buenisimas siempre y cuando la patata esté libre de materia grasienta. Para mi, esas son las patatas bravas ideales. 

Y yo las he conseguido de esta manera que os contaré más abajo.






Un poquito de historia sobre nuestra receta


Las patatas bravas son un plato típico de la gastronomía española, y son una de las tapas con más presencia en nuestros restaurantes. Son unas patatas cortadas en daditos, fritas en aceite hasta que quedan doradas y acompañadas de una salsa de tomate picante. Lo más destacable de este plato es la deliciosa y picante salsa.

El origen de este plato no está muy claro, hay quien lo atribuye a Casa Pellico otros dicen que se empezó a servir en la Casona, ambos bares madrileños y ya desaparecidos, lo que sí es cierto, es que fue sobre 1960 y que las colas alrededor de estos dos bares sólo para probar las patatas bravas fueron míticas.

También existe mucha controversia sobre los ingredientes de esta salsa, basicamente se diferencian en dos vertientes, aquellos que defienden la presencia del tomate y otros que opinan que no debe llevarlo y que su color se debe a la presencia del pimentón.

Encontramos variedades a lo largo de todo el país, en Madrid, cuna de esta receta, se hace con tomate y cayena; en Cataluña y la Comunidad Valenciana se hace con un majado de ajo, aceite de oliva, guindilla y pimentón; en Andalucía suelen servirse acompañadas de ali-oli,...


La ONU en un recopilatorio de 200 recetas de patatas publicado en 2008 la incluyó como receta típicamente española.



INGREDIENTES


Para la salsa


1 cebolleta picada
1 pizca de pimentón picante de la vera
2 dientes de ajo
1 chile rojo entero
3 guindillas cayenas
0’5 l. de salsa de tomate
2 cucharadas de ketchup
1 pizca de vinagre de sidra
Medio vaso de agua
AOVE
Sal


Para las patatas

4 patatas grandes troceadas
AOVE 
Sal



ELABORACIÓN:


Salsa Brava en Tradicional.


1. Triturar en un robot cebolleta, pimentón, ajo, sal, aceite de oliva, hasta conseguir una pasta. En una olla rehogar durante 5 min. esta pasta, dando unas vueltas para que se cocine.

2. Añade la guindilla, tomate, ketchup, vinagre, agua, sal y guisamos al menos 15 minutos.



Salsa Brava en Thermomix.


1. Pon la cebolleta, el pimentón, el ajo, la sal y el AOVE y pica durante 1 minutos a velocidad progresiva 5-7. Baja los restos de las paredes del vaso hacia las cuchillas y programa 5 min, 100º, velocidad 1.

2. Añade las guindillas, tomate, ketchup, vinagre agua y sal y programa 15 minutos, varoma, velocidad 2. Terminado el tiempo tritura durante 1 minuto a velocidad 10.



Elaboración de las Patatas:

1. Pela, lava y seca las patatas. Corta en rodajas de casi un dedo de grosor.

2. En una cazuela por agua a hervir. Cocer las patatas hasta que estén en su punto (cocidas pero enteras, y que no se deshagan). Sacar del agua, escurrir y secar con cuidado con ayuda de papel de cocina.

3. Fríe las patatas cocidas en la freidora o en una sartén con abundante AOVE. Dorar y reservar en un plato de presentación.

4. Sala, salsea con la brava y espolvorea con hojitas frescas de tomillo limón.







Comentarios

Victoria ha dicho que…
mmmmmhhh....! Ricas y elegantes ¡y que no falte la cañitaaa!